1. piso
Alquilamos el piso.
Su cabello era tan largo que alcanzaba el piso.
Puedo poner las palmas de mis manos sobre el piso sin doblar las rodillas.
En el primer piso vivía un viejo funcionario judicial.
El señor Hopkins habló tan alto que podía oírle desde el piso de arriba.
Acusaron a la madrastra de haber tirado al niño del séptimo piso.
Había sangre por todo el piso.
No hay agua caliente en el cuarto piso, pero la hay en la planta baja.
Me costó mucho encontrar tu piso.
Tengo que encontrar un piso para alquilar en Barcelona.
Hay leche por todo el piso de la cocina porque mi esposa rompió la botella.
Estoy ocupado buscando piso.
¿El piso tiene tres habitaciones?
Creo que es hora de que me mude a un piso más pequeño.
La empresa constructora aseguró que nos entregaría el piso en seis meses.
2. suelo
Se cayó al suelo.
Suelo usar vaqueros los domingos.
Hoy en día no puedes andar por la calle sin ver a la gente tirar la basura al suelo.
Cuando se marchó la jefa, los empleados se quedaron en silencio oyendo los taconazos que daba contra el suelo, para asegurarse de que realmente se había ido.
-¡El suelo está sucio! -le regañó la dependienta- ¡Todavía ni siquiera has pagado el traje, y ya lo estás ensuciando!
Por la noche suelo estudiar matemáticas.
Caminando por esta calle, suelo ver a un amigo mío.
Puedo poner las palmas de las manos en el suelo sin doblar las rodillas.
Suelo tener conjuntivitis.
Suelo levantarme a las siete y acostarme a las once, salvo los domingos.
Yo suelo caminar.
Me hizo el favor de iluminar el suelo a mis pies con su linterna.
A mí no me gusta demasiado el café, pero una taza de vez en cuando suelo tomar.
Los domingos por la tarde suelo salir de compras.
No suelo ver muchas películas, pero no puedo resistirme a un buen documental.